¿Qué es un calambre muscular?
Un calambre muscular es una contracción repentina e involuntaria de uno o más de tus músculos. Pueden causar un dolor intenso, llegando a despertarte por la noche. Incluso pueden anular temporalmente la función del músculo afectado. Algo que en determinadas situaciones, como cuando estás nadando, puede resultar especialmente inoportuno.
La fatiga tras ejercicio excesivo, algunos medicamentos y ciertas afecciones médicas pueden causar calambres musculares.
Los nervios periféricos, funcionando de forma desregulada y sensibilizada, son el origen de estos calambres. (Muscle cramps. Review article. Miller TM, et al. Muscle Nerve. 2005).
La hipótesis acerca de su fisiopatología es que los calambres resultan de cambios en la excitabilidad de la neurona motora (origen central), o bien debido a descargas espontáneas de los nervios motores (origen periférico).(Origin and development of muscle cramps. Review article Minetto MA, et al. Exerc Sport Sci Rev. 2013).
La teoría del «control neuromuscular alterado», junto a la teoría de la «deshidratación», es actualmente el modelo descriptivo más convincente que explica el origen de los calambres musculares. (Exercise-Associated Muscle Cramp-Doubts About the Cause. Jahic D, et al. Mater Sociomed. 2018).
¿Es grave un calambre muscular?
Generalmente, los calambres musculares, también conocidos como rampas (en Valencia) o espasmos musculares, son inofensivos. No obstante, en determinadas circunstancias pueden requerir una especial atención:
- Causar graves molestias.
- Asociados con hinchazón de las piernas, enrojecimiento o cambios en la piel.
- Asociados con debilidad muscular.
- Suceder con mucha frecuencia.
- No mejora con el autocuidado.
- No están asociados con una causa obvia, como el ejercicio extenuante.
¿Cual es la causa de un calambre muscular?
El uso excesivo de un músculo, la deshidratación, la tensión muscular o simplemente mantener una posición durante un período prolongado, pueden causar calambres musculares.
Aunque muchas veces los calambres son de causa desconocida, algunos casos pueden relacionarse con:
- Aporte deficiente de sangre. La arteriosclerosis, el síndrome compartimental crónico, el uso de prendas de ropa o vendajes ajustados, pueden producir calambres en piernas y pies durante el ejercicio. Estos calambres generalmente desaparecen poco después de dejar de hacer ejercicio.
- Compresión nerviosa. La compresión de los nervios en la columna (estenosis lumbar) también puede producir un calambre en las piernas. El dolor empeora cuanto más caminas. Caminar en una posición ligeramente flexionada hacia delante, puede mejorar o retrasar la aparición de los síntomas. Esta posición consigue descomprimir ligeramente los nervios.
- Déficit de minerales. La falta de potasio, calcio o magnesio en la dieta puede contribuir a los calambres en las piernas. Los diuréticos, medicamentos recetados a pacientes con hipertensión arterial, también pueden reducir la disponibilidad de estos minerales.
- Deshidración. La práctica de deporte extenuante, sobre todo en climas cálidos, se relaciona con una mayor deshidratación. Estos atletas con frecuencia sufren calambres musculares más frecuentes. De ahí la importancia de reponer líquidos regularmente cuando se practica ejercicio.
- El embarazo. Los calambres musculares también son comunes durante el embarazo.
- Condiciones médicas. Existe un mayor riesgo de calambres musculares en personas con diabetes o trastornos nerviosos, hepáticos o tiroideos.
¿Puedo prevenir los calambres musculares?
La predisposición personal a sufrir calambres musculares es muy variable. Aún así, hay aspectos a considerar para evitar o reducir la frecuencia de los calambres musculares.
- Evitar la deshidratación. Bebe muchos líquidos todos los días. Los líquidos ayudan a que los músculos se contraigan y se relajen, y a mantener las células musculares hidratadas y menos irritables. Bebe antes, durante y después del ejercicio.
- Haz ejercicio. Si sueles tener calambres en las piernas por la noche, haz unos minutos de ejercicio ligero (caminar, bicicleta estática) antes de acostarte. Hacer unos estiramientos de los músculos de las piernas un par de minutos puede también resultar de ayuda.
Tratamiento de los calambres musculares
Las estrategias de tratamiento que han sido investigadas para los calambres incluyen: vendajes neuromusculares, prendas de compresión, masaje, electroterapia, suplementación e hidratación con electrolitos, ejercicio correctivo, estiramientos, quinina, jugo de pepinillos, estrategias de hiperventilación.
Una amplia variabilidad de enfoques.Desde el punto de vista más personal, basado en la experiencia como fisioterapeuta, y como deportista, destacaría la función de los estiramientos, como estrategia de resolución del calambre una vez instaurado (aunque en el momento de dolor no sea lo más apetecible), y como prevención, el masaje, la neurodinámica, y sobre todo la hidratación y aporte de potasio.