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Me: Bueno, 4 intentos, y esta vez parece que la cosa no ha ido tan mal.

MrBrain: ¿y qué es lo que se dice…?

Me: Graaacias, aunque tampoco te pongas así que menudo susto me has dado. El primer día casi me hundes en la miseria.

MrBrain: ¿aún no te das cuenta de que en el fondo intento cuidar de ti?

Me: Nunca lo he dudado, pero qué maneras te gastas a veces. Me hiciste parecer un troll de los pantanos, y eso que sólo hice 4 cambios de 30 segundos corriendo.

MrBrain: ¿y qué hubieses hecho si yo hubiera permanecido impasible, sin opinar?

Me: Pues seguramente hacer más cambios,… pero ¿hacía falta provocarme todas esas molestias incluso hasta la mañana siguiente?

MrBrain: No insultes mi inteligencia. De no ser por mi sutil sugerencia, seguro que hubieses vuelto a salir a correr, y no precisamente unos cambios de 30 segundos.

Me: Cierto, la verdad… hasta te permitiste un exótico dolor en espejo. No diré que sea original, pero si lo que querías era asustarme, doy fe que lo conseguiste. Incluso me exploré la rodilla sana un par de veces para comprobar que doblaba y estiraba, que es en definitiva lo que tiene que hacer. Ahora bien, ¿y eso de proyectar dolor en la cadera?

MrKnee: Yo tengo algo que decir al respecto, me temo. Ya os dije que necesitaba un poco más de vasto medial. Y, por lo visto, algo más de fuerza en el resto de músculos que me circundan. Si no, es imposible cumplir las órdenes que me mandáis… y mi vecina la cadera se ha visto obligada a absorber todos los impactos que normalmente yo amortiguo.

MrsHip: Con lo tranquila que yo estaba, sin meterme con nadie, y entre todos a amargarme la existencia a martillazos en mi brillante cartílago acetabular.

MrBrain: Demasiado bien me estoy portando con la faena que me estáis dando entre todos.