Acabo de asistir a una exposición dedicada a Ötzi, el hombre del hielo.
Hace 20 años encontraron en los Alpes esta momia de un hombre que fue aseteado por la espalda y dejado a su suerte hace unos 5300 años. Desde entonces y hasta ahora, no han cesado los descubrimientos, fruto de la investigación de este sorprendente, aunque casual, hallazgo.
Aunque son muchos los datos curiosos que se han extrapolado de la momia de Ötzi, me ha llamado curiosamente la atención la presencia de unos 60 tatuajes y, sobre todo, su interpretación.
Al parecer, y en relación con los hallazgos radiológicos, Ötzi sufría un avanzado estado de artrosis, más acusado precisamente en las zonas tatuadas. Presumiblemente, estas zonas desencadenarían más dolor, que los terapeutas del momento intentaban paliar con pequeñas incisiones cutáneas que posteriormente frotaban con carboncilla.
Lejos de los fines estéticos, estos tatuajes parecen ser técnicas analgésicas, algo así como seccionar las finas fibras neuronales, o una acupuntura rudimentaria.
Una forma como otra para acceder desde la periferia al dolor…
5 Replies to “Los tatuajes de Ötzi”
iMAM & Prazer: era la teoría anterior (o marcas de guerra, estética, jerarquía social,…), pero hace 3 años le atribuyeron un carácter analgésico por presentarse tan sólo en zonas más afectadas mecánicamente,
la verdad es que la idea del calentón adolescente a mi también me ha gustado, y fue lo primero que pensé en la exposición hasta que leí la letra pequeña.
Y acerca de la «pornografía del dolor», buscaré una presentación en relación con el tema que me dejó helado.
iMAM, me ha gustado lo de calentón adolescente.
De todas maneras qué opinais de la busqueda de «dolor» como reafirmación personal al hacerte un tatoo? (idade..)
¿serían «tatuajes» para tratar la artrosis… o puede que fueran tatuajes de un calentón adolescente y con el tiempo desarrollara la artrosis justo donde le tatuaron?
(no, no es un mensaje oculto de un padre que no deja a su hija tatuarse, no)
Vaya, aunque lo que limitó al pobre Ötzi, fue, más que el dolor, el quedar desangrado después de que un desaprensivo le arreara un flechazo por la espalda…
son esas cosas que nos hacen a los homo sapiens los animales más animales, creo yo…
Un saludo, David
😉
¡¡Que gran entrada!!. El Homo Sapiens es la fantástico!!…Años y años de evolución, grabados en nuestro ADN. Una lucha contínua por superar nuestros límites y llegar más allá que nuestros antepasados homínidos…y si eso que nos limita es el dolor, da igual lo que nos remontemos, que siempre nos sorprenderán nuevos descubrimientos sobre distintas formas de evitar que el dolor nos limitara en ese proceso de «dar un paso más» en nuestra vida y en nuestra evolución. Un saludo.